martes, 15 de febrero de 2011

Las gotas de lluvia se transformaron en lágrimas: Chile eliminado de Colombia 2011.


Todos queríamos que esta historia continuase en tierras cafetaleras, pero la historia, la maldita historia nuevamente peso más que las ganas de un puñado de nobles jugadores de ir a una cita mundialista.

No todo comenzó en este partido, los errores en defensa, la poca capacidad de definición, los errores arbitrales y las malas decisiones técnicas formaron un cumulo de problemas que fueron factores importantes, e incluso fundamentales a la hora del resumen.

Chile cayo inapelablemente ante Ecuador por 1 a 0, nuestros jugadores no tuvieron un mal desempeño dentro del campo de juego, pero nuevamente los errores a la hora de meter la gordita regalona dentro del arco.

Dentro de los primeros 45 minutos los rojos no tuvieron opciones claras, Bryan Carrasco y Cesar Pinares, intentaron inquietar el arco rival pero sin éxito, Yashir Pinto fue un hombre que no pudo demostrar toda su valía.

Lo mas importante del primer lapso fue un tiro libre de Marlon de Jesús, que el portero Claudio Santis saco de forma fenomenal con mano cambiada.

En la segunda etapa Chile domino y se creo oportunidades, pero no lo suficiente, solo al minuto 63, Yashir Pinto trato de inquietar al arco de los del guayas, pero su remate resulto pifiado, no se sabe por impericia, por la lluvia, por lo resbaladizo del terreno o por el caprichoso destino.

Al minuto 71 se venia la noche, Dixon Arroyo, remato de volea perfecta un centro desde la derecha, el cual fue inalcanzable para Santis.

Desde ese instante Chile se fue con todo en demanda del arco rival, en búsqueda no solo del empate, sino de la victoria, único resultado que le servía para clasificar, pero como bien ya sabemos esos goles nunca llegaron.

Ahora solo queda esperar que nuestros dirigentes tomen cartas en el asunto, la sub 20 ya quedo eliminada del mundial, Cesar Vaccia es cada día menos creíble en una banca nacional, todo hace pensar que el nuevo dt de selecciones juveniles será Víctor H. Castañeda, pero eso es harina de otro costal.

Por: Rodrigo Cáceres.

Foto gentileza: agencia Reuters.

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