Universidad de Chile demostró toda su capacidad en la presente jornada, para vencer como local por 3-2 a Unión Española, en un excelente partido válido por la fecha 8 del Torneo de Apertura. El conjunto colegial comenzó perdiendo 2-0 (goles de Gonzalo Barriga), pero con paciencia, empuje y fútbol se llevó los tres puntos merced a los tantos de Gustavo Lorenzetti, Charles Aránguiz y Raúl Ruidíaz.
Con este resultado, el actual campeón del fútbol chileno sigue en la punta de la tabla de posiciones, ahora con 19 unidades, mientras que los hombres de José Luis Sierra –que perfectamente pudieron ganar el cotejo- se quedaron con sus 10 positivos.
BARRIGA Y SU ZURDA
El primer tiempo del juego en el Nacional tuvo emociones y goles, algo que siempre se agradece. Incluso, el poco público que llegó al estadio, ya que sobre la U todavía recae el castigo por el “caso bengalas”.
Precisamente en este lapso se vio muy bien al cuadro rojo, que complicó en exceso a su rival. Por lo mismo no llamó la atención que se fuera en ventaja.
En el minuto 17 el zurdo Gonzalo Barriga hizo sentir su presencia goleadora. Sacó un fuerte remate que dejó sin chances a Johnny Herrera para decretar la apertura de la cuenta.
Pese a que el conjunto azul trató de revertir el marcador –con variadas órdenes de Jorge Sampaoli-, fue el mismo jugador hispano quien alargó las cifras.
Esta vez Barriga (39) sacó un tiro cruzado que hizo estéril el vuelo del portero estudiantil. Sin embargo, Unión no pudo extender más el guarismo y lo terminó pagando caro.
En el minuto 36 y tras una excelente acción de Junior Fernandes, Gustavo Lorenzetti puso el descuento con el que se fueron al descanso.
“SAN” RAÚL RUIDÍAZ
En el reinició mejoró el nivel de Matías Rodríguez y de inmediato subió la U, algo que también se vio ayudado porque Unión no tuvo el mismo empuje que en la primera mitad.
En el minuto 56 Eugenio Mena ganó por la izquierda y sacó el “centro de la muerte”. Charles Aránguiz, en plena área, la clavó en el ángulo de Eduardo Lobos.
De ahí enmás se vivió lo mejor del partido. Las ocasiones se sucedieron y los metas sacaron remates imposibles (a Emanuel Herrera y Lorenzetti, por ejemplo). Incluso, hasta el palo le ayudó a Herrera.
Pero cuando el duelo ya estaba en “tierra derecha”, apareció la nueva figura goleadora de los colegiales. En el 84 Raúl Ruidíaz tocó el balón con sutileza dentro del área para poner el 3-2 final.
En este emocionante juego también se vio la “pierna fuerte” y Jorge Sampaoli se fue a los vestuarios con anticipación por reclamar.
Así se llegó al final, la U volvió a demostrar su valía y Unión vendió muy cara su derrota, pues en algún momento pudo llevarse el triunfo.
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